El Entrefútbol, en dónde la practica no lleva a la perfección

lunes, 30 de noviembre de 2009

Papá tenía razón

“Mi padre tenía razón, el motociclismo es muy duro”

El ex-piloto de 125cc e hijo del legendario Ángel Nieto, confiesa que a lo largo de su carrera profesional ha tenido “más disgustos que alegrías”.

Con sólo 29 años de edad, y a pesar de haber tenido ofertas para competir la próxima temporada en la categoría de Moto 2 (sustituta de 250cc), Pablo Nieto no contempla la posibilidad de volver a los circuitos como piloto de ningún equipo.

El hijo pequeño del motociclista más laureado de todos los tiempos no tiene ánimos como para afrontar una experiencia más a los mandos de una nueva moto, pues alega “no estar al 100%” y “para eso es mejor no correr”. Criado en una familia en la que las motos son una forma de vida, Pablo nos habla con el tono y la expresión del que ya tiene una trayectoria a sus espaldas, y con la tranquilidad de sentirse conocedor de todo, o casi todo lo que se puede vivir dentro del mundo de las dos ruedas. Además nos cuenta que es una profesión que requiere dedicación absoluta, que no le permitía “pensar en familia ni en nada, sólo en motos”.

Cuando hablamos de un chaval que cogió su primera moto de juguete a los tres años y que se puso a lomos de una de competición a los doce, nos sorprendemos al ver que no tiene carné, pero la respuesta está en que su padre no le deja “porque sabe que iría como un loco y dice que es muy peligroso”.

Y es que el retiro del menor de los Nieto es casi total. Al igual que la pregunta de cuáles fueron los motivos por los que Pablo Nieto no consiguió hacerse un nombre en el motociclismo, es casi obligada. A su juicio “no fue por falta de talento, sino que casi nunca he tenido una buena moto con la que poder competir”. La posibilidad de poder contar con una máquina en condiciones cobra una relevancia trascendental en nuestra conversación, llegando incluso a comentar con una leve sonrisa que “Telefónica se gastó en su momento más de 2 millones en prepararle una moto a Pedrosa, y yo por aquel entonces estaba con un patrocinador mucho más humilde”. Es éste un buen momento para ponerlo en la eterna disyuntiva: ¿Pedrosa o Lorenzo? “Creo que Dani es más técnico, pero Lorenzo tiene más valentía”.

No obstante, no nos olvidamos de su anterior afirmación acerca de la importancia de la moto, y comenzamos a indagar sobre cómo con ese apellido no llegaron buenos patrocinadores. “Ser hijo de Ángel Nieto siempre es una buena carta de presentación, pero no lo es todo. Uno de mis mayores errores fue fichar por Derbi justo en el momento en que mejor me encontraba. Mala moto y malos jefes. Te aseguro que si mi padre se encuentra con uno de ellos la situación sería tensa”. Parece que la conclusión a la que llegamos es que las dos principales razones de su irregularidad son la imposibilidad de correr con un buen galgo, y la mala suerte: “siempre he elegido el peor sitio en el peor momento”. El ex-piloto reconoce que a su padre no le faltaba razón cuando le aconsejaba optar por otra profesión, pues “el mundo del motociclismo es muy duro, te lleva más palos que alegrías”.

Para suavizar ya un poco el ambiente, empezamos a divagar sobre Valentino Rossi y las posibilidades que tienen los pilotos españoles de arrebatarle el trono. “Rossi es el mejor dentro y fuera de la pista, y creo que hasta que se retire lo seguirá siendo”.

Ahora su mente está puesta en la gestión del nuevo equipo G-22 Racing, que compartirá junto a su hermano mayor Ángel. Los pilotos “serán Fonsi Nieto, que actuará como líder”, y Yanick Guerra, un joven con “futuro prometedor que viene de las superbikes”. El equipo competirá en la categoría de Moto 2 y esperan conseguir buenos resultados, aunque no tienen un “objetivo claro al ser el primer año de la competición y del equipo”.

A pesar de los malos recuerdos, Pablo sigue prefiriendo ser piloto que manáger de un equipo. Nos dice que los buenos recuerdos son “especialmente bonitos, como mi victoria en el Gran Premio de Portugal. Posiblemente mi mejor recuerdo.” Esperemos que vengan más, aunque ahora desde detrás del muro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario